Se busca abordar el debate sobre una serie de procesos, fenómenos y dinámicas del espacio urbano desde la perspectiva de género e interseccional. Perspectiva que es transversal a la discusión de etnia, clase, discapacidades e identidad sexual, al permitir entender y analizar las brechas en las relaciones de poder.

Este eje propone un espacio de debate para analizar críticamente temas como: el derecho al hábitat y la ciudad, el cuerpo como territorio, economía urbana, género, políticas urbanas interseccionales y cotidianidades del espacio público. Además, busca evidenciar las diversas metodologías de análisis, en especial la cartografía feminista como nueva lectura de diálogo, en donde el mapeo y la representación se convierten en una herramienta fundamental para expresar, comunicar y denunciar procesos históricamente inequitativos, así como para evidenciar el potencial de prácticas colaborativas.

La primera temática que se aborda en este eje es cómo los derechos al hábitat y a la ciudad se entrelazan con las cuestiones de género e interseccionales. Las desigualdades sobre el acceso al suelo y vivienda adecuada, de los servicios básicos, infraestructura urbana y la falta de participación en la toma de decisión afectan de manera desproporcionada a las mujeres y grupos históricamente excluidos.

El cuerpo como territorio, surge desde el ecofeminismo del sur y el feminismo comunitario, este concepto de cuerpo-territorio, reconoce la interconexión entre el cuerpo humano y el entorno natural, así como las relaciones entre sociedad y naturaleza. Desde esta perspectiva, la tierra es concebida como territorio, no solo como un espacio físico, sino como la base fundamental para la reproducción sociocultural de la vida y la construcción de vínculos comunitarios.

La economía urbana y el género serán analizados desde una perspectiva crítica para comprender cómo las desigualdades de género e interseccionales se reflejan en el acceso al empleo formal, la diferencia salarial, en la carga de trabajo doméstico y de cuidado, a la doble o triple jornada, cargos de dirección, representación política, toma de decisiones y oportunidades económicas.

Las políticas urbanas interseccionales serán fundamentales para abordar las intersecciones entre género, etnia, clase social y otras dimensiones de la identidad en la formulación y aplicación de políticas urbanas. Reconociendo que las experiencias de exclusión y marginalización son múltiples y se entrelazan. Por eso, es crucial adoptar enfoques inclusivos y sensibles al género que aborden las necesidades y demandas de todos los grupos en el ámbito urbano.

Finalmente, las cotidianidades del espacio público serán examinadas para comprender cómo las experiencias de las mujeres, personas LGBTQ+, cuerpos no binarios, estéticas no hegemónicas, corporalidades diversas, desde enfoques interseccionales en el espacio urbano están sometidas por normas de género y prácticas discriminatorias. Desde la distribución desigual de los recursos y servicios hasta la presencia de violencia de género en el espacio público, es necesario analizar cómo se configuran y perpetúan las desigualdades de género en la vida cotidiana en la ciudad.

En este sentido, no solo se pretende promover un debate académico, sino reflexionar y generar un espacio clave para impulsar un cambio social significativo para los territorios y ciudades que se transformen en espacios equitativos y justos para todos sus habitantes. Fortaleciendo la participación popular activa en los procesos de planificación y las perspectivas de género en la formulación de políticas públicas. Este eje no solo busca comprender las dinámicas actuales, sino también generar resistencia y compromiso social para una transformación estructural.